20 Aforismos gastronómicos

Un aforismo es, según nos dice la RAE, una sentencia breve y doctrinal que se propone como regla en alguna ciencia o arte. Del latín aphorismus, y este del griego ?φορισμ?ς (definir), un aforismo es una declaración breve que pretende expresar un principio de una manera concisa, coherente y en apariencia cerrada.

Parece que el término aforismo fue utilizado por primera vez por Hipócrates. Y fue posteriormente aplicado a la ciencia y, finalmente, a todo tipo de principios. He aquí 20 ejemplos de aforismos gastronómicos:
 
  1. El universo no  es nada sin  la vida, y todo lo que vive se alimenta.
  2. Los animales se ceban; el hombre come; solo un  hombre de espíritu sabe comer.
  3. El destino de las naciones depende de la manera en que se alimentan.
  4. Dime lo que comes, y  te diré quién eres.
  5. El creador, al obligar al hombre a comer para vivir, lo motiva  por el apetito, y lo recompensa por el placer.
  6. El placer de comer,  es un acto de nuestro juicio, por el cual concedemos la preferencia a las cosas que son agradables al gusto sobre las que no tienen esta calidad.
  7. El placer de la mesa es de todas las edades, de todas las condiciones, de todos los países y diarios; puede  asociarse con todos los demás placeres, y sigue siendo el último que nos  reconforta  con su pérdida.
  8. La mesa  es el único lugar donde uno nunca se aburre durante la primera hora.
  9. El descubrimiento de un plato nuevo hace más por la felicidad del género humano que el descubrimiento de una estrella.
  10. Los que se indigestan o  se emborrachan no sabe ni beber ni comer.
  11. El orden de los  comestibles es desde el  más sustancial hasta el más ligero.
  12. El orden de las bebidas es desde la más moderada hasta la más aromáticas y perfumada.
  13. Afirmar que no es necesario cambiar vinos es una herejía; la lengua se satura; y después de la tercera copa, el mejor vino despierta solo  una sensación de embotamiento.
  14. Un postre sin queso es como una bella mujer a la que le falta un ojo.
  15. Uno se convierte en cocinero, pero nace catador.
  16. La calidad más indispensable del cocinero es la exactitud: debe ser también la del invitado.
  17. Esperar demasiado tiempo a un huésped atrasado es una falta de respeto para todos los que están presentes.
  18. El que recibe a sus amigos y no da ningún cuidado personal a la comida que les prepara, no es digno de tener amigos.
  19. La señora  de la casa debe garantizar siempre que el café sea  excelente; y el señor debe elegir los licores de primera calidad.
  20. Invitar a alguien, es encargarse de su felicidad durante todo el tiempo que está bajo nuestro techo.